viernes, 26 de abril de 2013

MI EXPERIENCIA EN MEDIOAMBIENTAL (II), por Berenice

El viejo cementerio del Hospital Psiquiátrico de Conxo es un lugar olvidado, y al olvidarlo, también lo hacemos con las personas que están debajo de su tierra, que alguna vez fueron alguien aunque en vida, sólo por su estado mental, estuvieron relegados a un plano casi inexistente en la sociedad.

Para mí, la actividad de voluntariado que se realiza ahí, sirve para desenterrar ese olvido y hacer un sitio digno para quienes están ahí debajo. Da mucha lástima ver lápidas con nombres casi borrados por la erosión, así como ver sólo cruces con números, malas hierbas rodeando las tumbas, descuidadas, salvajes. No es sólo una cuestión ambiental.

También está el hecho de que es una actividad que conlleva a un estado de bienestar; llevamos a cabo un increíble trabajo físico entre cavar, cortar la hierba, rastrillar la tierra y otras cosas. Mejora mucho el estado de ánimo, ayuda a trabajar la autoestima y las habilidades sociales, la actitud hacia el trabajo. Tiene un efecto antidepresivo, reduce el estrés y modifica considerablemente los malestares o trastornos de sueño, entre otros efectos en el cerebro y el cuerpo. Hablamos de una actividad que complementa perfectamente otras actividades llevadas a cabo en la asociación que se preocupa por el bienestar mental de sus usuarios.

Es muy importante dar continuidad a los cuidados realizados en el viejo cementerio, porque a través de los voluntarios, usuarios o no, se está rehabilitando un espacio que como he dicho antes, se encuentra muy olvidado, se están fomentando valores y cambiando viejos conceptos que se tenían con las personas que están en un psiquiátrico, quitando el estigma sobre ellos. Hoy en día ya no me imagino a nadie llamar a los enfermos del psiquiátrico "endemoniados", como no me imagino aislar sus restos de otros en cementerios condenados al olvido.

Y por otra parte, los que acudimos cada miércoles ahí, sin proponérnoslo estamos en un proceso de curación y desintoxicación personal, absolutamente todos. Creo que no hace falta tener diagnosticado un trastorno mental para darnos cuenta de que cualquier persona necesita hacer este tipo de cosas de vez en cuando.

Es sumamente saludable, por lo que recomiendo que cualquiera que me lee, no relacione nuestras actividades con enfermedades mentales. De alguna forma todos estamos un poco enfermos, todos tenemos algún grado de cansancio en nuestra mente, un síntoma de tristeza o apatía sobre todo en los tiempos que corren. Cualquiera, por muy escasas que sean vuestras sospechas de la necesidad de acudir a una asociación como Itínera, es bienvenido a acercarse a cortar de raíz, nunca mejor dicho, esas espinitas emocionales que tengáis clavadas.

jueves, 25 de abril de 2013

LA MOSCA, por Néstor

En el cineclub de Itínera estamos realizando un breve ciclo sobre el director canadiense David Cronenberg, y en la primera sesión comentamos la película "La mosca", del año 1986. El compañero Néstor nos ofrece sus observaciones sobre la película:
  • Me resultaron muy emocionantes los gestos de los protagonistas al principio.
  • Me impresionó cuando Seth Brundle (Jeff Goldblum) dijo a Veronica Quaife (Geena Davis) que no escribiese un artículo con lo que él le había revelado.
  • Me pareció casi excesivo lo del mandril ensangrentado tras el teletransporte.
  • No me pareció creíble cuando Seth le pregunta a Veronica si "es un romance lo que estamos viviendo" y le da un beso, como si Seth no sintiese nada por ella.
  • Después de el exnovio y editor de Veronica, Stathis Borans (John Getz), le dice a ella que no quiere que desaparezca de su vida, le pregunta él "¿y qué hay del sexo?", lo cual me turbó bastante.
  • Después de que Seth se teletransporte a sí mismo, justo antes de que el mono le sale encima y Seth lo coja en el aire, me pareció como si el mono estuviese asustado debido a que Seth había aparecido, tras teletransportarse, en un lugar distinto.
  • Cuando Veronica no quiso teletransportarse, Seth le dijo "sabes que eres una estúpida", lo cual no me gustó nada.
  • A veces, los saltos y contorsiones que hace Seth me resultan muy impresionantes e interesantes.
  • Seth, queriendo "llevarse" a la chica que estaba en la barra del bar al que había acudido, le dice a los que estaban echando un pulso "y si gano me llevo a la dama", lo cual enfadó a la chica, que exclamó cabreada "¿Qué dices? ¿Es que me consideras una fulana?". Mientras corriendo Seth la lleva en brazos subiendo las escaleras de donde él vive, me pareció terrorífico, psicopático.
  • Me resultó incongruente cuando Seth le preguntó a Veronica por qué había asustado a la mujer con la que él acababa de acostarse, la cual, poco antes de llegar Veronica, le quería echar a Seth aceite en las heridas de su espalda. Él tiró el vaso brutalmente y ella siguió humillándolo, diciéndole que tenía una piel de princesa, todo lo cual me pareció muy interesante psicológicamente.
  • Después de caerle una oreja a Seth, Veronica, que estaba con su exnovio, me pareció que estaba muy hermosa.
  • Me pareció gracioso cuando Seth dijo que se había convertido en "Brundlemosca".
El director David Cronenberg con los protagonistas Jeff Goldblum y Geena Davis, que eran pareja en la vida real en el momento del rodaje.

jueves, 18 de abril de 2013

MI EXPERIENCIA EN MEDIOAMBIENTAL (I), por Melisa


Para mí ha sido de mucha ayuda el participar en esta actividad medioambiental, sobre todo con respecto a las relaciones sociales. Me ha ayudado a ser una persona más abierta, más natural y menos nerviosa. Por casi primera vez en mi vida pude llegar a sentirme bien estando con gente.

La verdad es que no estoy del todo segura de cuáles son exactamente las cualidades que hacen tan efectiva esta actividad para mí, pero intentaré enumerarlas.

En primer lugar, creo que la mayoría aquí tenemos algo en común: algún problema psicológico que nos llevó a esta asociación. Eso hace difícil, en mi opinión, que alguien se sienta raro, el loco del lugar. Y también hace que cada persona sea interesantemente diferente y que se me haga más atractiva la idea de relacionarme.

Además, los no usuarios suelen ser muy amables y considerados, supongo que concienciados de que lo suyo no es un trabajo cualquiera. Otra de las cosas positivas que veo en esto está en el hecho de que se trata de una actividad solidaria. Una siente que hace algo bueno por el mundo, que sirve para algo. Me gusta pensar que estoy haciendo algo por esa gente poco aceptada por la sociedad, que fue olvidada en el cementerio de un hospital psiquiátrico, cada persona con su historia. Aunque todas con algo en común conmigo.

Siguiendo con las ventajas de que sea una actividad voluntaria, hay que mencionar la falta de tensiones entre compañeros que habría en lugares como mi instituto, donde toda la gente va más o menos obligada. Otra causa de este ambiente tranquilo tal vez sea que el estar concentrados en el trabajo nos impide prestar atención a los problemas que pueda haber alrededor, o también la cooperación, el hecho de que todos nos ayudamos, lo cual nos acerca más que una simple conversación.

Por último, al venir aquí, hago mucho ejercicio, lo cual no solo es sano para el cuerpo, sino también para  la mente, tomo el aire y veo bosque. Aprendí a hacer actividades de campo, cosa de la que antes no tenía ni idea; a no llegar tarde y a soportar la lluvia. A veces encontramos huesos, y eso es muy emocionante para mí. Pensar quién sería. Es como tener en las manos una reliquia.

En resumen: estoy muy contenta de poder participar en esta actividad. Este trabajito llegó a ser, en su momento, la principal actividad que coloreaba cada semana de insoportables jornadas de estudio y clases en el instituto. Hoy sigue significando un buen respiro de mi rutina diaria.


jueves, 11 de abril de 2013

EL PROFESOR CHIFLADO, por Patricia

El pasado jueves 4 de abril en el cineclub de Itínera hemos debatido la película The Nutty Professor (El profesor chiflado) bajo la dirección de Jerry Lewis, película que seleccionó y presentó nuestro compañero Dani.

Se trata de un filme, de 1963, de tipo cómico y melodramático, al mismo tiempo, que narra la historia de un profesor llamado Julius Kelp (Jerry Lewis) que es profesor de química en la Universidad. Se enamora de una de sus alumnas (Stella) y cansado de las constantes burlas hacia su persona por parte de su alumnos musculosos y fuertes, decide apuntarse al gimnasio. Al ver que no era una práctica adecuada para él, decide realizar una poción o brebaje para conseguir ser una persona musculosa. Así, por unas horas se convierte en Buddy Love, tratándose de una persona muy atractiva pero que, al mismo tiempo, era bastante egocéntrica y violenta en su forma de comunicarse o dirigirse a los demás.

Aunque no suelo ver con asiduidad películas tan antiguas, considero que podemos hacer de cada una diferentes lecturas y aprender de ellas. En este caso, de esta película podemos extraer muchas propuestas interesantes. En primer lugar, en el momento en que prueba diferentes pócimas hasta quedar con la definitiva, el laboratorio puede recordarnos a Frankenstein, con las similitudes que tiene Buddy con la creación de una bestia. Se puede apreciar una gran similitud con “El extraño caso de doctor Jekyll y el señor Hyde”, pudiendo observar las dos caras o facetas de una misma persona, siendo Buddy Love lo que puede que le gustaría ser a Kelp en realidad, la parte mala de sí mismo que quiere vengarse de esos alumnos y alumnas que se burlan y se ríen de él constantemente.

También, en la faceta de Buddy se puede hacer un paralelismo con el alter ego reprimido del propio Julius y, por otra parte, la escena en la que recuerda su infancia donde la madre tenía todo el poder y sentía pena por su padre, aspectos que nos recuerdan a la psicología freudiana. Igualmente con estas dos personas, podemos ver el transcurso de la adolescencia a la edad adulta, como bien se ha comentado en el cineclub. El personaje de Buddy actúa de una forma más juvenil, la forma de vestirse, la necesidad de ser el centro de atención, etc.

Estas son algunas de las múltiples influencias o aspectos en los que se pudo haber basado el director a la hora de realizar este filme, haciendo que el espectador deba pararse a reflexionar sobre el trasfondo que tiene la propia película.

Personalmente, me ha parecido una película que refleja los conflictos que en ocasiones podemos llegar a sentir las personas, teniendo una personalidad y un carácter al querer comportarnos de otra manera distinta a lo que somos, como nos gustaría llegar a ser. Pero, al final, la realidad supera a nuestras percepciones y deseos, y debemos aceptarnos tal como somos para así poder ser valorados por los demás, como en un momento alude Julius al ser desenmascarado e intentar explicar los motivos por los que ha llegado a realizar ese experimento para cambiar su identidad. Igualmente, también se puede ver la influencia que tiene la sociedad de cara a valorar por encima de todo la belleza, la fama o una forma concreta de entender el amor. De cualquier manera, considero que hay dos lecturas principales que se pueden realizar; o bien quedarse con la idea de que se trataba de un reflejo de la realidad de aquel entonces para acentuarla, o bien que se utilizó esa realidad desde un punto de vista cómico con el objetivo de hacer una crítica a ciertas situaciones sobre las que el espectador debería pararse a reflexionar.

En cualquier caso, toda película debe ser entendida en un contexto concreto y en un tiempo concreto, por tanto y a este respecto, desde aquí agradecer a mis compañeros esa presentación de la biografía y trayectoria profesional del director del filme como al resto de ellos por sus opiniones, reflexiones y conclusiones.

Concluyo con una frase del final de esta película. Sobre la que considero deberíamos detenernos a reflexionar:
«No quiero ser nadie que no soy, ni ser otra persona que yo mismo, pero al mismo tiempo me alegro de haberla sido, puesto que he averiguado algo que no sabía antes. Has de estar muy contento de ser quien eres, y pensar en los días que te restan de ser así, y, bueno, si no te aprecias tú mismo, ¿qué aprecio puedes esperar de los demás? Eso es lo que he descubierto.»
Un momento especialmente desquiciado de la película.

sábado, 6 de abril de 2013

ISPANSI! (ESPAÑOLES), por Rafa

El pasado 21 de marzo comentamos en el cineclub de Itínera la película de Carlos Iglesias "Ispansi! (Españoles)" (2010), seleccionada por el compañero Rafa, que además se documentó sobre los aspectos históricos que refleja el film y nos realizó una completa presentación. Ahora, es también el propio Rafa el que nos ofrece una panorámica sobre lo que les ocurrió a aquellos llamados "niños de la guerra":

La película Ispansi cuenta la historia de los niños españoles republicanos en Rusia, y de una relación entre una mujer de ideas falangistas y un hombre de ideas republicanas. Esta relación no creo que pudiera existir en los tiempos en que ocurre esta historia, pero el director de la película lo que quiso transmitir es la reconciliación entre las dos españas: que por encima de tus ideales se puede convivir, cada uno con sus ideas, mientras que con la guerra sólo se consigue rencor y odio.

Los niños republicanos marcharon a países como Rusia, Inglaterra, Bélgica, Francia, México y Suiza. Al acabar la Guerra Civil Española, todos volvieron a España, menos los que fueron a Rusia. La causa por la que se marcharon de España fue el miedo a las represalias de los nacionales, y por los bombardeos a la población civil, sobre todo a partir de los bombardeos a Durango y a Guernica. La mayoría de estos niños eran del frente norte, sobre todo vascos y asturianos.

Embarcaron en navíos de los puertos de Valencia, Asturias, País Vasco, y al final de la guerra, de Barcelona. Algunos barcos hacían escala en puertos de Francia o Inglaterra, y hacían trasbordo a otras naves. Algunos se quedaron en estos países, pero la mayoría fueron a Rusia. La travesía fue problemática: en algún barco, como en el "Habana", durmieron en las bodegas.

A su llegada a Rusia, fueron recibidos por muchos rusos que salieron a la calle para aclamarlos. Lo primero que hicieron los rusos fue tirar las ropas, ducharlos, y hacerles un reconocimiento médico. A los niños que tenían tuberculosis los enviaron a balnearios al lado del Mar Negro. Al resto los mandaron a casas de niños. Les sorprendió mucho ver a mujeres ocupadas en trabajos que en España estaban reservados a los hombres. En las casas de niños no sólo había niños españoles, llegaron con ellos de España profesores y educadores. Entre los niños también estaban los sobrinos de Antonio Machado.

"Niños de la guerra" practicando gimnasia en una de las "casa de niños españoles" en la URSS (fuente).
La educación que recibían consistía en materias en español y ruso, como gramática, literatura y costumbres españolas, y el idioma ruso y su Constitución. Para ellos era una novedad el hacer gimnasia todos los días. Cuando volvieron a España, siguieron con la costumbre de hacer gimnasia y andar para estar en forma, cosa por la que en la España de aquella época, sobre todo a los primeros que llegaron, les tildaron de locos. Parte de los niños españoles estudiaron con becas en las casas de jóvenes. Algunos estudiaron más tarde carreras universitarias, y a otros los metían en la escuela de oficios, para después trabajar en las fábricas, y se les daba la opción de trabajar y estudiar al mismo tiempo.

Cuando los alemanes intentaron conquistar Rusia empezaron las penalidades para los niños: faltaba comida y tenían que ser trasladados a lugares más seguros, lejos del frente. Pero nunca dejaban de dar clases. Los niños de más edad trabajaban en fábricas o se alistaban en el ejército ruso.

Al morir Stalin, los niños españoles pudieron retornar a España gracias a un acuerdo entre las dos partes. Muchos volvieron en 1956 y a su llegada a España, al puerto de Valencia, les hicieron un carnet de refugiados, les cogieron las huellas dactilares y les interrogaron. Los americanos que estaban en sus bases de España también les interrogaron para obtener información sobre el funcionamiento de las fábricas rusas. Pero algunos tuvieron que volver a Rusia, porque sus parejas rusas no se aclimataron a vivir en España. Los comienzos fueron difíciles, no todas las familias de España quisieron acogerles hasta que pudieran encontrar trabajo y una vivienda. En algunos lugares los curas les presionaban para que se casaran y bautizaran a sus hijos en la religión católica. Con el paso de los años vino más gente de Rusia, sobre todo a partir de la Perestroika.

Cuando estaban en Rusia nunca se olvidaron de España, enseñaban a sus hijos el idioma y las costumbres españolas, unos conocimientos que en algunos casos pasaron después a sus nietos. Los españoles en Rusia se solían reunir en el Centro Español que había en Moscú.

Jóvenes españolas del Instituto de Idiomas extranjeros durante la 
manifestación del 1º de Mayo en Moscú en 1949 (fuente).